OSCARS INTERACTIVOS

Desde que se dieron a conocer los nominados, el seguimiento de los oscars ha sido continuo en las redes sociales. De hecho, Google incluso creó una aplicación, Oscars Search Trends para que los internautas pudieran saber cuáles eran los candidatos más seguidos en cada categoría. Si queremos ver una correlación entre seguimiento y premio, el caso más claro es, sin duda, el de Natalie Portman, pues la ganadora del Oscar a Mejor actriz por Cisne negro, es, de entre las nominadas, la que más fans tiene en Facebook (391.784) y la que más tweets ha generado. No se puede decir lo mismo, sin embargo, de los actores, ya que siguiendo esa regla de tres, Javier Bardem, con Biutiful, debería haber sido el que se alzara con la preciada estatuilla, pues es el que cuenta con más fans en Facebook (143.592), aunque seguido muy de cerca por James Franco (140.342) y Colin Firth, el gran triunfador con El discurso del rey (132.223). Muy lejos quedan, eso sí, Jeff Bridges (58.894) y Jesse Eisenberg (5.914), por lo que quizás los actores deberían aprender la lección para el próximo año y dedicarse a mover un poco más sus redes sociales.

Ahora bien, no todo se queda en las cifras. Para los que quieran ir más allá, The guardian tiene una guía interactiva con la sinopsis de todas las películas, vídeos, reseñas de los principales periódicos y entrevistas con los directores, entre muchas otras cosas.

LAS AEROLÍNEAS NAVEGAN POR LAS REDES

Parece que las líneas aéreas se están poniendo las pilas sociales. Algunas lo hacen proponiendo interesantes concursos a los internautas, como el que organizó recientemente Easyjet con motivo del día de San Valentín. Tras la pregunta "¿Cuál es el máximo tiempo que pueden estar besándose dos personas?", se escondía el regalo de un viaje a Venecia para la pareja que demostrara –vía webcam– que el suyo era el beso más largo. La idea tiene su mérito, pues consigue relacionar fecha, acción y premio con el romanticismo, que es de lo que se trata, y con  un coste mínimo para la empresa. 

En KLM, la cosa también va de regalo, pero un poco más peliculero, con persecución incluida. La compañía aérea rastrea a la gente que hace check in con Forsquare o Twitter, revisan su perfil personal y le hacen un regalo en consonancia con sus gustos. Algunos se extrañan de que los pasajeros no se quejen al darse cuenta de que les han espiado el perfil, pero lo cierto es que a nadie le amarga que le den una grata sorpresa, ¡y menos cuando está aburrido esperando para embarcar!

FACEBOOK CONTRA BERLUSCONI

Somos muchos los que nos preguntábamos hace tiempo por qué razón la sociedad italiana se quedaba impasible ante la conducta criminal de su Primer Ministro. Algunos aseguraban que la explicación estaba en el control férreo que éste ejerce sobre los medios de comunicación y, muy especialmente, sobre la televisión, medio que Berlusconi utiliza como herramienta de defensa y propaganda personal. Pero mira por dónde, resulta que esa máxima de "si lo dice la tele, será porque es verdad" ha caído en picado gracias al quinto o sexto poder –ya no se sabe– que es Facebook. Y lo más bonito del caso, en tanto que lo hace mucho más creíble, es que las movilizaciones que se inician en esta red social parten, a menudo, de un particular o de una pequeña asociación, que es lo que ha ocurrido en Italia, donde desde el principio ha quedado patente que detrás de las manifestaciones no se encuentra ninguna ideología política, sino la gran indignación de las mujeres y hombres de ese país. Una vez más, Facebook ha dejado claro su futuro como medio de comunicación en el más estricto sentido de la palabra.

TURISMO 2.0

Teniendo en cuenta lo indispensable que se está haciendo para realizar cualquier viaje, es extraño que los fabricantes de maletas no incorporen ya en su diseño un pequeño bolsillo para guardar nuestro iPhone. Las guías 2.0 como la de Lonely Planet van camino de convertirse en un clásico, y empiezan a surgir otras más personalizadas, como la de la compañía iActive, que, mediante el denominado Smartourism, genera planes de visita en función del tiempo, los recursos y gustos personales del usuario. Pero la guía es sólo un aperitivo, pues luego podremos, por ejemplo, echar mano del Wikihood, una herramienta  que permite, gracias a la geolocalización, consultar en tiempo real toda la información sobre monumentos, edificios y otros aspectos del lugar que estemos visitando. Y si en alguno de esos lugares nos encontramos con un texto escrito en un idioma que no entendemos, no pasa nada porque Word Lens nos lo traducirá al instante. Además, a la hora de pagar en un país fuera de la zona euro, ya no tendremos que hacer complicados cálculos mentales redondeando por arriba o por abajo, bastará  con poner en marcha la aplicación Currency. Igual que tampoco tendremos que pasarnos las vacaciones preocupados por los retrasos de los vuelos o los malentendidos en los aeropuertos, pues dispondremos de la aplicación FlightTrack, que nos informará puntualmente. En todo caso, éstos van a ser pocos porque, como habremos sido previsores, nuestro Weatherbug nos habrá avisado de dónde va a hacer mal tiempo y lo habremos descartado de la ruta. En fin, que muy pronto podremos hacer el viaje perfecto, pero entonces... ¿DÓNDE QUEDA LA AVENTURA?

GOOGLE SE METE EN LOS MUSEOS

El nuevo servicio del buscador más popular del planeta, el Google Art Project, no tiene nada que ver con el tecnológico software, sino con el mejor arte de las historia, pues pone a disposición del público las piezas de los museos más prestigiosos del mundo. Los estudiantes y amantes del arte en general tienen ahora la posibilidad de explorar detenidamente obras tan valiosas como La habitación, de Vincent van Gogh, mientras aumentan, giran o cambian de posición la imagen. Además podrán, si lo desean, utilizar las piezas para crear su propia producción.

Este servicio se vale de la tecnología de Street view, aunque con una diferencia sustancial: frente a los polémicos coches que circulan por las calles y toman fotos sin permiso del ciudadano, en este proyecto cuentan con la bendición de los administradores de los propios museos, quienes han abierto sus puertas de par en par a las cámaras de Google. Así pues, es de suponer que este servicio no tendrá problemas legales. Lo que está por ver es si, al igual que el Street view, también se convertirá en un aliado de la industria turística o de grupos musicales de vanguardia como Arcade Fire para hacer proyectos tan interesantes como The wilderness downtown. El tiempo dirá.